UPN ha manifestado hoy que la sentencia de la Audiencia Nacional «que considera que la kale borroka no es terrorismo» constituye un «retroceso en materia antiterrorista evidente, después del avance que supuso la demostración de que Batasuna y los grupos que apoyan y colaboran con acciones violentas y criminales forman parte del entramado de ETA».
Los regionalistas han señalado que respetan la decisión judicial pero no la comparten en absoluto. «Nadie comprende esta decisión que ha creado una alarma social y ha provocado la indignación de quienes defendemos el Estado de Derecho y creemos en la Justicia, y sobre todo, en quienes han sufrido el azote del terrorismo y las acciones violentas callejeras de los grupos proetarras», han resaltado.
Por ello, han confiado en que el Estado de Derecho al final prevalezca «y corrija esta decisión que nos parece una barbaridad y desmotiva a quien se juega la vida en la lucha contra el terrorismo y defiende la libertad y la democracia».
Asimismo, han considerado que el proceso ha estado cargado de «gestos aberrantes», «desde la permisividad y el silencio del Gobierno y de los máximos responsables de la Administración de Justicia ante el envío de observadores por parte del Gobierno vasco al juicio, hasta el comportamiento faltón y amenazante de los imputados tolerado en el proceso, que han pretendido convertir a las víctimas en verdugos y viceversa».
Finalmente, han calificado la sentencia como «una nueva prueba de la marcha atrás en la contundencia contra ETA, con todos los mecanismos que el Estado de Derecho pone a disposición, y una prueba más de los caramelos que se están ofreciendo en este momento de posibles negociaciones».