Javier Pomés, Parlamentario europeo de UPN
La «habilidad» negociadora de nuestro presidente Rodríguez Zapatero ha conseguido que España sea el país que más pague por la ampliación europea. Más que países mucho más ricos como Francia o Alemania. Pero, para el Gobierno, el resultado ha sido un éxito.
Perdemos 43.000 millones de euros de saldo neto, incluidos los 4.000 millones que dejarán de percibir nuestros agricultores. Pero la negociación ha sido fabulosa. Vamos, que España soporta el 25% del precio de la ampliación cuando sólo representa el 9 por ciento del PIB comunitario, pero Zapatero es un negociador más hábil que cualquier vendedor del Zoco. Y es que no entiendo cómo tras perder el 85 por ciento de las ayudas europeas, la gente no ha salido a la calle para dar las gracias a su presidente.
Para Navarra, como es lógico, los resultados también son desastrosos. Decimos adiós a más de la mitad de los Fondos Estructurales y de Cohesión que recibíamos, aunque comparado con la marginación que hemos sufrido en los Presupuestos del Estado pactados por el PSOE y su socios nacionalistas, perder «sólo» la mitad quizás sí puede considerarse un éxito. Otras comunidades como Asturias o Murcia han perdido tres cuartas partes de sus ayudas. Como pueden suponer, sus ciudadanos también están organizando el día del Zapatero negociador, con bandas de música y fuegos artificiales.
En medio de esta esquizofrenia informativa, unos dicen que los resultados son excelentes y el resto que «va a ser que no», hay quien intenta justificar el resultado afirmando que es relativamente bueno teniendo en cuenta que estaba claro que la ampliación nos iba a costar muchos millones. Sí, es cierto, sabíamos que íbamos a perder, pero hay una sutil diferencia entre caer uno a cero y encajar cinco goles sin ser capaces de marcar ninguno, sobre todo si no hay partido de vuelta hasta dentro de cinco años.
Es verdad que todos los países han perdido algo, pero ellos han sabido buscar contrapartidas y nosotros hemos hecho la estatua. Por ejemplo, las regiones «objetivo 2» -las del nivel de Navarra- de países mucho más ricos que España como Suecia o Austria recibirán 150 millones extra. Los alemanes han conseguido incluso 75 millones más para Baviera, una de las regiones más ricas de Europa. Es más, Francia ha logrado incluirse, junto a Luxemburgo, Austria o Suecia, entre los países receptores de una prima para estados con escaso peso agrícola. ¡Francia! ¿Alguien lo entiende? ¿Hay alguna contraprestación para Navarra por perder el 56% de sus ayudas? No.
Y es que quizás se otorgaron esas ayudas a otros estados pasadas las doce la noche, cuando, mientras otros países seguirían hasta las tres de la mañana presionando para lograr resultados más positivos para sus ciudadanos, nuestra delegación había dado por perdido el partido y se había retirado. Eso es negociar: no retroceder, sino dar media vuelta y avanzar… hacia la cama del hotel.
