UPN ha denunciado que «el PNV habla mucho de respeto a las decisiones del pueblo pero desprecia continuamente la voluntad mayoritaria de los navarros con su política de injerencias sobre Navarra».
«En realidad su hipocresía política les lleva a continuar anteponiendo los interés y su estrategia independentista por encima de los propios de Navarra», señalan los regionalistas..
Según UPN, «los navarros hemos dejado muy claro cómo queremos vivir y cómo queremos relacionarnos con el resto de españoles, de Europa y del mundo. No necesitamos de salvadores que anteponen sus intereses de independencia por delante de los valores fundamentales de los seres humanos, como es el derecho a la vida».
La formación regionalista, «como principal fuerza política de la Comunidad Foral», ha exigido a Imaz respeto a los símbolos «que le son propios» y ha considerado que «Navarra, a diferencia de la Comunidad Autónoma Vasca, no ha tenido que diseñar una bandera ni componer un himno que identificase a esta tierra».
Para UPN, «la sociedad navarra está cada día más convencida de la sinrazón de los nacionalistas, que incluso tienen la desfachatez de criticar con términos totalmente desafortunados que el Gobierno de Navarra defienda la legalidad y postule la defensa de Navarra y de su identidad como pueblo».
Los regionalistas se han referido así mismo a la instrumentalización política del euskera. «El nacionalismo vasco vuelve a hacer una flaco favor al euskera cuando lo hace instrumento de su política independentista».
«Es inadmisible el adoctrimaniento político al que el PNV quiere someter a los centros educativos de Navarra donde se enseña el euskera, sobre todo los de la zona donde el castellano es el único idioma oficial, pues supone una aberración educativa y una injerencia absoluta que no puede ser consentida», han concluido.