- La acusación a los regionalistas se ha producido durante el Pleno del Parlamento
- UPN acusa al PSN de “impasividad” y de usar una moción para permitir que se calumnie a los regionalistas
UPN ha considerado “intolerable e indigno” que EH Bildu le haya acusado de “emplear la violencia en este Parlamento” y que dicha acusación “se haya hecho con la aquiescencia del PSN”.
‘Son ustedes, señor Iriarte, quienes emplean la violencia en este Parlamento’ han sido las palabras exactas pronunciadas por la parlamentaria de EH Bildu, Arantxa Izurdiaga, en el debate de una moción que ha presentado el PSN para condenar cualquier declaración política que fomente e incite al odio hacia cualquier persona o grupo social.
Para los regionalistas, “supera todos los límites del sarcasmo y la desvergüenza que el partido de Otegi y Araiz acuse a UPN de practicar la violencia, ante la impasividad del partido socialista, promotor de la moción, que ha sido incapaz de decir nada en su turno de réplica”.
A este respecto, han acusado al PSN de “usar una moción que podría haber suscitado consenso para buscar la confrontación y permitir que EH Bildu le calumnie acusándoles de ejercer la violencia”. “Los que han defendido a los verdugos acusan de ejercer la violencia a quienes hemos sido víctimas, no puede haber mayor desfachatez e indecencia”, han añadido.
“Una vez más, cuando se trata de reprochar a Bildu, el partido socialista se calla para no enfadarles o, lo que sería más grave, porque comparte la acusación”, han reprochado.
Dos enmiendas rechazadas
UPN ha presentado dos enmiendas a la moción, que no han sido aceptada por el PSN, y que pedían incluir, por un lado, que el Parlamento condenara “cualquier acto de odio (y, expresamente, los atentados terroristas y las agresiones contra la
integridad física de las personas)”, así como “rechazar la firma de acuerdos de Gobierno con quienes no condenan tales actos o discursos de odio; y, por otro, comprometerse con una democracia pluralista en donde se respeten los derechos humanos, la separación de poderes, la igualdad ante la ley y la libertad de expresión, legalmente regulada, frente a las tentaciones autoritarias de los populismos de derecha e izquierda”.