(AGENCIAS) El presidente del Gobierno de Navarra y de UPN, Miguel Sanz, aseguró, en su intervención en el Día del Partido, que los navarros «jamás cambiaremos paz por territorialidad» y no permitirán que «otros decidan por nosotros» en un supuesto proceso de diálogo para poner fin al terrorismo.
En un discurso pronunciado ante unos 1.300 dirigentes, cargos públicos y afiliados de UPN, Sanz resaltó que, en el debate sobre el Estado de las Autonomías, preguntó al presidente José Luis Rodríguez Zapatero «con toda la corrección pero con firmeza» cuál era su política de pactos con los nacionalistas vascos en Navarra de cara a las próximas elecciones autonómicas, pero «se salió por la tangente».
«Cualquier socialista que cree en España y en la Navarra foral», aseveró, «hubiera respondido sin vacilar» en el sentido de que «no se puede pactar con quienes pretenden hacer desaparecer a Navarra del Estado de las Autonomías» y además «proclaman su pertenencia a una patria inventada, Euskal Herria».
Sanz consideró que el PSN-PSOE «lidera una alternativa al Gobierno de UPN y CDN» con formaciones nacionalistas, algo que consideró «legítimo», aunque «los ciudadanos deben saber qué van a hacer» los socialistas en Navarra tras las elecciones del 2007.
El PSOE, agregó, «si tiene oportunidad alcanzará el Gobierno de Navarra haciendo lo que ya está haciendo en otros lugares de España», en alusión a los pactos con los nacionalistas, y lo hará «aunque no quieran los de aquí», porque «esas decisiones se toman en Madrid».
El dirigente de UPN subrayó al respecto que el Gobierno de Rodríguez Zapatero «necesita el poder en Navarra para apalancar toda su política territorial y estatutaria», así como el llamado «proceso de paz o de normalización política».
En este sentido, Sanz manifestó que, en ese contexto, «Navarra es la clave para acceder a alguna de las pretensiones planteadas por los terroristas» y, de hecho, señaló, ETA «siempre sitúa a Navarra en el eje de sus comunicados».
Sin embargo, el presidente navarro opinó que «el terrorismo no necesitan gestos ni malabarismos ni pronunciamientos ambiguos ni funambulismos», sino que exige «firmeza y fortaleza, sólo alcanzable desde los partidos que dicen compartir las grandes cuestiones de Estado».
Por este motivo, Sanz hizo un llamamiento al entendimiento entre el PSOE y el PP, ya que en su opinión hay «una necesidad urgente de recomponer la situación» para «hacernos fuertes frente a quienes pretenden remover los cimientos de nuestra admirada Transición».
Por otro lado, el presidente indicó a los cientos de afiliados congregados en el polideportivo de Sangüesa que Navarra cuenta con un Gobierno «fuerte, unido, seguro, que genera confianza, que tiene ideas, a pesar de la nula atención que nos presta en este momento el Gobierno de Zapatero».
El Gobierno foral, destacó, «es una máquina que está a punto, preparada y dispuesta a seguir sirviendo a Navarra y a los navarros», por lo que a su juicio difícilmente se puede conformar una alternativa «que garantice los niveles de progreso y bienestar actuales».
Sanz criticó especialmente las escasas inversiones que, en su opinión, ha realizado el Gobierno de la Nación en la Comunidad Foral y afirmó al respecto que Navarra «es una tierra que cumple sus compromisos pero que también exige al Gobierno de España que cumpla los suyos en materia de infraestructuras».
DATOS DEL ENCUENTRO
Por primera vez el Día del Partido no se celebró el 3 de diciembre, coincidiendo con el Día de Navarra. La apertura del V Centenario de San Francisco Javier aconsejó el cambio de fecha y los órganos de dirección de UPN decidieron adelantar la fiesta al domingo 27 de noviembre y hacerlo en SANGÜESA, cerca del castillo de Javier, como muestra de apoyo a la celebración.
Además del frontón, se tuvo que habilitar una CARPA anexa de 25×15 metros para acoger a más de 1.300 afiliados. Unas 400 personas se quedaron sin poder asistir por falta de espacio. De la zona Norte (Baztán, Leiza, Irurzun y Alsasua) acudieron casi un centenar de simpatizantes y de la localidad anfitriona se sumaron otros 45. Hubo afiliados procedentes de las cinco merindades y de los 60 comités locales de UPN. También asistieron afiliados que residen en Zaragoza, Logroño, Cantabria, País Vasco, Barcelona y Madrid. La organización fletó 19 autobuses para quince trayectos diferentes. Unas 300 personas asisten en coches particulares.
Como cada año los afiliados que cumplen 15 años de antigüedad recibieron un diploma de reconocimiento a su militancia. También hubo un homenaje a las víctimas del terrorismo.