El PSOE se ha opuesto de nuevo a que Navarra pueda acometer el corredor navarro del AVE al rechazar la enmienda formulada por UPN, a través del Grupo Popular, en el Pleno del Congreso que ha debatido el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2007.
Los diputados de UPN, Jaime Ignacio del Burgo y Carlos Salvador, al conocer el resultado de la votación, han denunciado la actitud de los diputados socialistas navarros que han votado en contra de una iniciativa que coincide con una resolución en el mismo sentido adoptada por el Parlamento de Navarra y que fue apoyada por el Partido Socialista de Navarra. «No cabe mayor incoherencia y mayor desprecio hacia los intereses generales de nuestra Comunidad», han señalado.
Los presupuestos para 2007 demuestran que el presidente Rodríguez Zapatero no tiene «ningún afecto por Navarra», consideran. «No se puede maltratar de esta forma a una Comunidad que siempre ha demostrado su voluntad de cooperación con el Gobierno de la nación en todo aquello que contribuya al interés general», han agregado.
«No puede ser peor el estreno afirman los diputados de UPN- del candidato socialista, Sr. Puras. Ha reconocido que sus gestiones no han dado resultado, luego si las hizo fue porque creía en la justicia de la enmienda. Otra cosa es que se haya puesto de manifiesto su insignificante peso político al no conseguir nada de nada».
Por ello, le han recomendado que «en lugar de arremeter contra los diputados de UPN encomiende al senador Chivite que enderece este entuerto en el Senado, a no ser que el secretario general del PSN siga pensando que el convenio propuesto sea contrario a la ley como afirmó en un principio».
«Lo único cierto han concluido- es que los dos años y medio de Gobierno socialista han sido una auténtica catástrofe para Navarra. Si hubieran cumplido, como dijeron que iban a hacer, el acuerdo suscrito en 2002 entre el Gobierno de Navarra y el ministerio de Fomento, en estos momentos las obras del AVE Zaragoza-Pamplona ya hubieran dado comienzo para finalizar el 2010. Ahora sólo hay incertidumbre».