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Javier Esparza rechaza el uso por el Gobierno vasco de los símbolos propios de Navarra

Agentes de la Ertzantza llevaban en sus uniformes el escudo de Navarra durante la toma de posesión de Urkullu

  • Agentes de la Ertzantza llevaban en sus uniformes el escudo de Navarra durante la toma de posesión de Urkullu
  • Exige a Chivite, que asistió al acto sin que haya trascendido ninguna queja por su parte, que pida explicaciones y respeto al presidente del Gobierno vasco

El presidente de UPN, Javier Esparza, ha mostrado “su rechazo y su malestar” por la inclusión del escudo de Navarra en los uniformes de agentes de la Ertzantza durante la toma de posesión del lehendakari Urkullu el pasado sábado, actuación que ha calificado de “insulto y falta de respeto al conjunto de los navarros”.

Esparza recuerda que en 1985 un auto del Tribunal Constitucional prohibió expresamente al Gobierno del País Vasco la inclusión del escudo de Navarra en su emblema, fecha hasta la que el Ejecutivo vasco había ignorado todas las peticiones realizadas por parte de Navarra para que se respetara su realidad institucional.

“35 años después, estos hechos vienen a demostrar que el Gobierno del PNV, con el apoyo del Partido Socialista de Euskadi, sigue empeñado en mostrar su deseo de anexión de la Comunidad foral, despreciando la voluntad manifiesta de los navarros y navarras”, ha manifestado.

Ante estos hechos, Javier Esparza ha requerido a María Chivite que “pida explicaciones a su homólogo en el Gobierno del País Vasco y que le exija respeto”. “Ante actuaciones así, Chivite no puede mirar para otro lado, por mucho que los socialistas sean socios de los nacionalistas vascos”, ha afirmado. “En caso contrario, está aceptando una concesión más al nacionalismo vasco que le ha dado la presidencia del Gobierno de Navarra”, añade.

“Por encima de sus intereses partidistas, la presidenta de Navarra debe defender la realidad institucional de la Comunidad foral. Es su obligación”, ha dicho.

Cabe recordar que la propia presidenta de Navarra asistió como invitada a la toma de posesión de Urkullu, sin que se conozca protesta oficial por la exhibición indebida del símbolo propio de Navarra.