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UPN denuncia que “la MCP utiliza los datos de los ciudadanos para analizar su basura”

  • Explican que los vecinos de Azpilagaña están recibiendo cartas personalizadas sobre cuánta basura depositan en cada contendor
  • Lo consideran “una intromisión injustificada en la intimidad de los vecinos que no está avalada en Ordenanza alguna”

El Grupo de UPN en la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona ha denunciado hoy que “la entidad está utilizando los datos de los ciudadanos para analizar la basura que estos generan y que depositan en uno u otro contenedor sin que exista ordenanza alguna que lo habilite”.

Los vecinos y comerciantes de los barrios de Azpilagaña y Nuevo Artica están recibiendo durante estas semanas distintas misivas en las que se les da cuenta del número de aperturas que han realizado en los contenedores de materia orgánica y de la fracción resto.

Los regionalistas han considerado este hecho “una intromisión injustificada en la intimidad de los vecinos que, además, no está avalada por ninguna normativa o acuerdo de los órganos de la Mancomunidad”.

De hecho, han recordado que “se ha puesto en marcha una experiencia piloto en Azpilagaña y Nuevo Artica y se ha anunciado su ampliación a otras zonas de la ciudad sin modificar la Ordenanza de Gestión de Residuos, lo que convertiría el nuevo sistema en ilegal”.

UPN ha afirmado que “es necesario trabajar en la reducción de la fracción resto y avanzar en mayor aprovechamiento de los residuos”, pero ha explicado que “este objetivo común no puede servir para entrometerse de forma indiscriminada y sin autorización alguna en la vida de los vecinos de la Comarca”.

Además, han recordado que “Bildu ya tuvo problemas en la Barranca y en Guipúzcoa por no respetar la intimidad de las personas en la gestión de las basuras” y han adelantado que “este es el inicio de un sistema con el que Bildu pretende también imponer sanciones”.

Por eso, han exigido que “antes de dar cualquier paso, se estudie y, en su caso, apruebe una modificación de ordenanza que dé cobertura al nuevo sistema, garantice la protección de los datos de los ciudadanos y ampare su voluntad o no de participar en el análisis de sus residuos”.

En este sentido, han afirmado que “los objetivos en este ámbito sólo se lograrán de la mano de los ciudadanos, haciéndoles partícipes de cambiar el modo en que gestionamos nuestra basura y nunca si se implanta la sensación de que se está tratando de imponer un control excesivo sobre sus vidas”.