- UPN: “La Ribera necesita agua y este gobierno lleva cuatro años negándosela”
El Parlamento de Navarra ha rechazado en el pleno que ha celebrado hoy una moción de UPN que pide que “la construcción de la segunda fase del Canal de Navarra se haga en su totalidad y en una sola fase”. Han votado en contra Geroa Bai, Bildu, Podemos-Orain Bai e Izquierda-Ezkerra y a favor UPN, PSN y PP.
“Se tiene que garantizar el riego de las 21.500 hectáreas, el uso industrial y el consumo de boca, albergando el máximo caudal posible, partiendo del mínimo de 20 m3/seg.”, ha defendido la parlamentaria regionalista, Mari Carmen Segura.
UPN pretendía rechazar así que la obra se realice en dos fases como contempla una de las alternativas posibles, “con una primera tubería y la segunda en unos 15 años como mínimo, que supondría que en un principio sólo se regarían 10.000 hectáreas de las 21.500 previstas”, ha señalado Segura.
Un segundo punto de la moción instaba al Gobierno de Navarra a que defienda en el Consejo de Administración de CANASA la opción que contemple la construcción de la segunda fase del Canal de Navarra “de la manera constructiva que mejor garantice el agua de boca en todo momento”.
A este respecto, Segura ha considerado “totalmente imprescindible que en el caso de elegir la alternativa de las dos tuberías, éstas se realicen al mismo tiempo, porque de esta manera se garantizaría el agua de boca y de industria en todo momento”. “Así, con dos tuberías, se evitaría que haya problemas de suministro, ya que las tuberías necesitarán limpiarse y ponerse a punto anualmente, una tarea que puede durar mínimo un mes”, ha explicado.
Respecto a la opción de una conducción única soterrada que, según ha destacado, no es descartable tras los errores detectados por el propio Gobierno en el estudio de alternativas, Segura ha señalado que “se deberán poner los medios oportunos para asegurar el agua de boca y de industria también en todo momento”.
La parlamentaria de UPN ha manifestado que “la Ribera necesita agua, y este gobierno lleva cuatro años negándosela”.
Así, ha criticado a la presidenta Barkos por haber incluido en su gobierno a dos consejeras puestas por Bildu, “partido que siempre ha estado en contra de Itoiz-Canal de Navarra”, y le ha acusado de mentir cuando afirma que UPN paralizó la segunda fase. A este respecto, ha aclarado que “se priorizó la ampliación de la primera fase en 2013 para hacer viable todo el canal”.
Además, ha recordado que “la segunda fase estaba totalmente definida cuando entró el nuevo Gobierno, que se pasó un año y medio poniendo pegas y haciendo estudios para llegar a la conclusión que ya se sabía, que la Ribera necesita agua de calidad y en cantidad”.
“Que la Ribera necesita agua es algo incuestionable, excepto para la consejera Elizalde que llegó a decir que iba a llevar agua donde ya había agua”, ha recordado. Y ha preguntado a la consejera: “¿Por qué no baja a la Ribera y se lo dice a la cara a los riberos y riberas que día a día sufren la mala calidad del agua de boca, o a los agricultores que tienen las restricciones de agua y no pueden cultivar lo que les gustaría y ven como sus cosechas sufren la falta de agua, o a las empresas agroalimentarias que no pueden ampliar porque no se pueden arriesgar a invertir si no tienen la seguridad de un volumen de agua adecuado a sus necesidades?”.
Por ello, ha opinado que “ha llegado el momento de que este Gobierno se deje de excusas, sea valiente y asuma el máximo compromiso con la Ribera de Navarra”. “La decisión sobre la segunda fase del Canal marcará el futuro de la Ribera y la única alternativa que hay es que el máximo caudal posible llegue de una sola vez. Cualquier otra opción sería no apoyar el desarrollo de la Ribera y poner en riesgo las necesidades de agua de boca de calidad de la zona presentes y futuras”, ha concluido.