En UPN defendemos la identidad de Navarra como Comunidad Foral diferenciada, integrada en la Nación española. Los socialistas quizá digan lo mismo, pero lo cierto es que han sido capaces de poner el futuro de Navarra en una mesa de negociación con terroristas.
Nosotros decimos la verdad y Zapatero no siempre lo ha hecho. En las páginas 46 y 47 del programa electoral del Partido Socialista en las elecciones de 2004, se decía textualmente:: «Nos comprometemos al cumplimiento escrupuloso y estricto del Pacto de Estado Por la Libertad y Contra el Terrorismo suscrito entre el Partido Socialista Obrero Español, el Partido Popular y el Gobierno de la Nación y, en especial, a renunciar a la utilización política del terrorismo; nos comprometernos a mantenerlo vivo y en vigor hasta la derrota total de ETA o su disolución efectiva». Y se añadía: «Nos comprometemos a la observancia estricta de la Constitución y por tanto rechazamos cualquier negociación que implique el pago de un precio político democrático por el fin de la violencia».
A nadie se le oculta que esto no ha sido así. Nos ha engañado, nos han dicho que no negociaban, nos han dicho que Navarra no estaba encima de la mesa, nos han dicho que de Juana estaba por el proceso, que Otegui era un hombre de paz, han dejado que Batasuna vuelva a los Ayuntamientos. Han olvidado a las víctimas, las han perseguido, han intentado dividirlas y, sobre todo, las han querido callar.
Nosotros sabemos cuál es la política que debemos practicar para acabar con ETA. Es la política de la unidad y de la de firmeza. Es una política que pasa por aplicar las leyes a los terroristas sin ninguna concesión. Es la política de acabar con el terrorismo con vencedores y vencidos.