(UPN/15.11.07) El secretario general de UPN, Alberto Catalán, ha condenado la colocación de sendos artefactos explosivos contra la sede de UPN en Caparroso y la del INEM en Tudela, que no han llegado a detonar, y ha afirmado que «los violentos y los que les apoyan no van a conseguir sus objetivos y mucho menos van a lograr amedrentar a una sociedad que quiere vivir en paz y en libertad».
Con estos ataques se demuestra que «los violentos pretenden coaccionar a los ciudadanos para imponer sus ideas y hacerles callar ante su barbarie», algo que «en ningún caso se va a producir», ha señalado Catalán.
En opinión del secretario general de los regionalistas, «estos cobardes ataques no varían ni un ápice la voluntad de UPN por trabajar por la sociedad navarra, en este caso por el bienestar de los vecinos de Caparroso».
Finalmente, Alberto Catalán ha manifestado que «los que cometen estos atentados, coartan la libertad de los demás y ponen en peligro la vida de las personas, incluso jalean a quienes asesinan y extorsionan, se merecen la respuesta contundente y el rechazo más absoluto de la sociedad, de las instituciones democráticas y del Estado de Derecho».