El Gobierno de Navarra ha dado a conocer el proyecto que pretende servir de impulso al desarrollo social y económico de las localidades que integran la zona pirenaica de Navarra. En él plan, que presenta una inversión de más de 210 millones de euros, han participado los diferentes departamentos del Gobierno de Navarra, los representantes de las juntas generales de los valles de Roncal, Salazar y Aezkoa; representantes de los municipios de Erro, Aoiz y Lumbier; y el Consorcio Cederna-Garalur.
Este Plan nace por la voluntad del Gobierno de Navarra de comprometerse con el desarrollo de una de las áreas consideradas por la Estrategia Territorial de Navarra como elemento clave para la sostenibilidad del bienestar del conjunto de la Comunidad Foral.
A través de un acuerdo de Gobierno de 23 de enero de 2006, el Ejecutivo encomendó al Consejo Social de Política Territorial "la elaboración de una estrategia específica para el Pirineo Navarro materializada en un Plan Estratégico de Desarrollo que concrete, programe y financie actuaciones encaminadas a la consolidación de las población y de las actividades económicas en la zona."
Un plan derivado de la Estrategia Territorial de Navarra
La Estrategia Territorial de Navarra (ETN), aprobada por el Parlamento de Navarra el 21 de junio de 2005, señala que "el Pirineo es un elemento clave de la sostenibilidad del bienestar navarro". Así, el desarrollo de esta parte del territorio navarro, definida como Área 7, se considera de relevancia estratégica y la ETN le dedica un apartado propio en el que se plantea como objetivo garantizar unas condiciones de vida dignas para los habitantes de la montaña como forma de mantener la población y, en la medida de lo posible, recuperar parte de la perdida en otras décadas.
La ETN recoge como objetivos esenciales para dinamizar la zona pirenaica los siguientes: potenciar y diversificar la economía rural; mejorar la accesibilidad física y virtual para aumentar la cohesión territorial; garantizar la calidad de vida; proteger los valores presentes en el Pirineo; y fomentar el mercado residencial.
De hecho, y según la propia ETN, el Pirineo, con 39 municipios (14% de Navarra), 1.895 km² (20%) y 11.124 habitantes (2%), es la bolsa de territorio navarro aquejada por más debilidades: municipios pequeños y desconectados, poco poblados, envejecidos y regresivos; un medio físico desfavorable para los sectores económicos tradicionales pero con mucha superficie de lugares protegidos y ambientalmente valiosos.