UPN ha condenado el ataque registrado esta madrugada contra la sede del PSN y UGT en Estella y ha considerado que es un nuevo intento de «chantaje y coacción» de los terroristas y una muestra más de «la nula disposición que tiene el entorno de ETA para respetar las libertades y la democracia».
Por ello, han afirmado que el fin de ETA no pasa «por hacer concesiones a los terroristas, ni enviar gestos de acercamiento para propiciar la negociación» a quienes ayer colocaron un coche bomba en Madrid y hoy atacan una sede socialista o colocan otra bomba en Baracaldo. «No cabe negociar nada con quienes insisten en la amenaza y en el uso de la violencia para imponer sus ideas», han añadido.
Los regionalistas han mostrado su solidaridad con los militantes socialistas y de UGT en Estella ante este «cobarde» ataque y les han animado a «no ceder espacios de libertad a la sinrazón terrorista».