El presidente de UPN, Javier Esparza, ha exigido hoy al Gobierno de Navarra que retire el proyecto de Decreto Foral por el que se regula el uso del euskera en las Administraciones Públicas de Navarra. Esparza ha hecho esta petición tras conocer el dictamen del Consejo de Navarra en el que se concluye que “no se ajusta a la legalidad” en varios artículos y en la disposición transitoria cuarta.
Esparza asegura que “el dictamen del Consejo de Navarra da la razón a UPN cuando afirmamos que el decreto impone el bilingüismo, que no respeta la realidad sociolingüística de Navarra y que, si se aprobaba este decreto, muchos navarros que no hablan euskera iban a tener muy difícil trabajar en la Administración, especialmente de la Ribera y de la zona mixta, hecho que contravenía la legalidad”.
“Este proyecto de Decreto Foral va contra la igualdad de oportunidades de todos los navarros”, ha afirmado
El líder regionalista ha manifestado su “completo acuerdo” con la conclusión recogida en el dictamen en la que se afirma que “la aplicación imperativa de la valoración del euskera como mérito para cualquier puesto de trabajo que no tenga perfil obligatorio en la zona mixta, en la zona no vascófona y en los servicios centrales, puede conllevar la aplicación de criterios discriminatorios en el acceso a la administración pública de la Comunidad Foral que no se correspondan con los principios de racionalidad y proporcionalidad, en la valoración del conocimiento del idioma, en relación con puestos de trabajo en los que este mérito pueda no ser relevante, en atención a las funciones a desempeñar y a la realidad sociolingüística del ámbito territorial en el que radiquen”.
Por otro lado, Esparza ha señalado que uno de los puntos que el Consejo de Navarra ha considerado que “no se ajusta a la legalidad” es el artículo 25.2 y ha recordado que “UPN ya denunció que este punto suponía de facto la generalización de los puestos bilingües, que son aquellos en los que el euskera es preceptivo”.
Este artículo, según el presidente de UPN, “deja libre albedrío al generalizar las causas de bilingüismo sin separar por zonas, de forma que lo impone donde no se habla e impide que alguien que no domina el euskera pueda acceder a un puesto en la Administración, algo que ha sido ratificado por el Consejo de Navarra”.
El líder de UPN ha pedido a la presidenta Barkos “que deje de utilizar el euskera para privilegiar a unos navarros frente a otros de manera injusta y contraria a la legalidad, y que respete la zonificación lingüística y la realidad sociolingüística de Navarra”.
“La actitud del Gobierno de Navarra tratando de imponer el euskera en zonas de Navarra donde prácticamente no se habla hace que muchos navarros se vean perjudicados en su relación personal o profesional con la Administración por el hecho de no hablar euskera”, algo que, a juicio de Esparza, “resulta inadmisible”.
En relación con las declaraciones de la consejera Ana Ollo en las que dice discrepar del dictamen del Consejo de Navarra en aquello que contraviene su proyecto, ha pedido al Gobierno “que no sea tan prepotente, que abandone su política de imposición ideológica al margen de las leyes y que no pretenda estar por encima de los letrados, en este caso, por encima del máximo órgano consultivo de Navarra”.
Ante este dictamen, Esparza ha concluido que lo que el Gobierno de Navarra debe hacer es dar marcha atrás en el decreto y dejar de imponer el euskera. “El euskera debe ser una lengua que apoyemos e impulsemos entre todos, pero sin tratarla de imponerla a costa de los derechos de los navarros que no lo hablan”, ha concluido.