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UPN pregunta por la implicación del Gobierno de Navarra con la Vuelta Ciclista a España

Los regionalistas creen que se han perdido oportunidades para el sector servicios de confirmarse la falta de colaboración. Recuerdan los más de 25.000 euros destinados a la Vuelta al País Vasco a su paso por la Comunidad Foral

UPN ha preguntado qué grado de implicación ha tenido el Gobierno de Navarra en la celebración de la Vuelta a España a su paso por el Circuito de Los Arcos, “ya que, de confirmarse que no ha existido colaboración económica alguna por la información que disponemos, se habría cometido un grave error y se habrán perdido oportunidades para potenciar el turismo y el sector servicios”.

“Sería sorprendente que la consejera Herrera acudiera al corte de cinta y no se haya esforzado en sacar el máximo provecho para Navarra a un evento tan importante como la Vuelta a España”, han considerado.

Para los regionalistas, “la retransmisión televisiva y la repercusión de las etapas de la Vuelta a España hace que millones de personas contemplen los principales enclaves de los lugares donde transcurre la carrera deportiva de forma que asegura una proyección turística de la Comunidad por la que discurre cada etapa y contribuye a una excelente difusión de su imagen”.

“Este hecho es aprovechado por los diferentes responsables públicos autonómicos para colaborar con la organización  y conseguir difusión de la marca turística o de la imagen de la Comunidad”, prosiguen.

A este respecto, han señalado que “los gestores privados del Circuito de Navarra sí han entendido que había que promocionar esta instalación”.

UPN ha recordado que “el Gobierno de Barkos destinó más de 25.000 euros por diferentes conceptos este mismo año a la organización de la Vuelta al País Vasco, a los que hay que sumar los 40.000 euros que abonó el Ayuntamiento de Pamplona”. “Todo ello pese a que la Vuelta al País Vasco cuenta con una relevancia y difusión muy inferior y, por lo tanto, su posible retorno económico es sensiblemente menor”, han agregado.

De confirmarse este dato, concluyen, “puede suponer una nueva actuación sectaria de un Gobierno que mira más por los intereses ideológicos que por el interés del sector turístico y la imagen de la Comunidad Foral”.