El grupo municipal de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona pedirá que el Pleno del Ayuntamiento “repruebe la conducta del alcalde, Joseba Asirón, por su amparo y legitimización de la violencia como herramienta para la obtención de objetivos políticos o de cualquier tipo”, después de que el regidor de Bildu se solidarizase con el concejal de Podemos Andrés Bódalo, “el concejal violento de Podemos condenado por agredir a un concejal socialista, su cuarto episodio violento desde 2002, y apoyase el indulto”.
Así lo ha anunciado Enrique Maya, portavoz regionalista en el consistorio, que ha afirmado que “con esta actitud, el alcalde no sólo ensucia la imagen de Pamplona, sino que se pone enfrente de la inmensa mayoría de sus ciudadanos, que no aceptan que impere en nuestro país la ley del más fuerte”.
Maya ha explicado que quiere que “pese a las palabras de Asirón, el Ayuntamiento reitere el compromiso de Pamplona con la paz y la libertad, desterrando y condenando todo tipo de conductas violentas, como las protagonizadas por Bódalo”.
“El uso de la violencia para alcanzar cualquier objetivo debería ser repudiado por toda nuestra sociedad y por los responsables públicos especialmente”, ha afirmado.
Maya ha subrayado que “sería imposible imaginar que alguien disfrutara del apoyo de líderes políticos por haber pegado a una mujer porque ésta se negaba a cumplir sus deseos, pero sin embargo parece que se quiere hacer pasar por legítima la violencia que pretende imponer una voluntad política”.
El regionalista ha recordado, además, que no es la primera vez que Asirón apoya a los protagonistas de acciones violentas o contrarias a la ley y ha recordado que “ya tuvo la poca vergüenza de reunirse con los autores confesos del boicot violento del Riau Riau, se ha abrazado a Otegui, ha participado en manifestaciones por la libertad de los presos etarras o ha cedido civivox para la propaganda de los acusados por pertenencia a EKIN”.
“Mientras, sólo los tribunales lograron impedir que censurara una exposición de víctimas del terrorismo o se ha negado a condenar los atentados de ETA o siquiera a apoyar a sus compañeros de Corporación frente a la presión radical durante la Procesión de San Fermín”, ha destacado.
Por eso, según el portavoz de UPN, “el apoyo a un personaje violento como Bódalo, que por cierto no ha pedido perdón por ninguna de sus agresiones, no puede considerarse un hecho aislado, es un capítulo más en la confirmación de una escala de valores que, al margen de sus palabras o falsos discursos, ampara y justifica la violencia como medio útil para la obtención de fines políticos”.
“Es el proyecto que pretende Bildu para Pamplona, el apoyo, el amparo, a ese tipo de conductas desde el Ayuntamiento, mientras se paraliza todo lo que supone avance y progreso para Pamplona”, ha subrayado Maya.
Según el regionalista, “Asirón ha decidido parar el desarrollo de Echavacoiz y la llegada del TAV, quiere parar Salesianos y de una manera encubierta pretende también evitar un proyecto singular en la antigua estación de autobuses, consolidando permanentemente el edificio y sus usos, en contra de lo previsto en el Plan Municipal”.
Por eso, ha adelantado que su grupo pedirá un posicionamiento del Pleno del Ayuntamiento a favor de “un proyecto claro para la antigua estación de autobuses, que cuente con la participación de distintos sectores de la ciudad, incluidos vecinos y comerciantes y que resulte acorde con las necesidades de la zona y del Plan Municipal del II Ensanche”.
Un proyecto de futuro y con participación para autobuses
“No puede ser que cada grupo del gobierno municipal proponga una cosa sobre el edificio y que nos vayamos a gastar 6 millones de euros en rehabilitarlo, según ha dicho Bildu, que se tirarían a la basura en menos de 10 años si llevan también a cabo el proyecto de Geroa Bai”, ha criticado.
Según el regionalista, “no puede ser que una de las manzanas principales de nuestro II Ensanche y un edificio emblemático se hipotequen por la improvisación o los celos entre los grupos del cuatripartito”.
“El Plan Municipal establece para este lugar un espacio emblemático de carácter cultural y social y nuestra postura sigue siendo esa, aunque ahora no sea el momento de desarrollarla, no se puede abdicar de dotar a Pamplona de una dotación que puede dinamizar nuestra ciudad, que puede contribuir a hacer de Pamplona una ciudad más moderna y completa”, ha reiterado.
Por eso, UPN propone “diseñar esa dotación dando participación a todos los grupos municipales, a las asociaciones de vecinos, de comerciantes, así como a hosteleros y asociaciones de carácter cultural y social para recabar la información y las aportaciones necesarias para lograr un proyecto que sea verdaderamente de ciudad y no una improvisación”.
“La asociación de vecinos, por ejemplo, trabajó intensamente en un proyecto que no ha sido siquiera valorado por Bildu”, ha criticado.
“Da la sensación que se va a rehabilitar las viviendas de forma energéticamente sostenible porque ha coincidido que había una convocatoria de subvenciones para este tipo de obras, pero que si hubiera habido otra, se hubiera hecho cualquier otra cosa”, ha lamentado.
Según Maya, “a día de hoy, y en resumen, tenemos un caos de informaciones y proyectos contradictorios e incompatibles entre sí que han marginado además la participación de los agentes sociales del barrio que deberían tener mucho que decir sobre el futuro del edificio”.
“Por eso, y visto que Bildu se niega a informar de forma pormenorizada del proyecto Geltoki, pedimos también una comisión monográfica para conocer el proyecto presentado a la Unión Europea, los futuros usos y posibilidades del edificio, así como su financiación”, ha sentenciado.