«En lugar de ofrecer la posibilidad de que los comerciantes que estén interesados acudan al Ayuntamiento para informarse de las ayudas, se les asalta en su establecimiento con la excusa de rellenar la encuesta conjuntamente», han argumentado.
En este sentido, han denunciado que con este procedimiento, además de «señalar» a los comerciantes que no se sumen al plan, «se les condiciona para que lo apliquen, ante el temor de que se les ponga en la picota».
Para UPN, esta iniciativa del concejal y parlamentario de EA, Maiorga Ramírez, «es una utilización del idioma con fines políticos y un ejemplo del sectarismo nacionalista».
Asimismo, han denunciado que el respaldo de la alcaldesa, Maite Mañú, y por lo tanto del PSOE, es una «nueva cesión a los nacionalistas», y los hace responsables de «esta imposición a los comerciantes de Tafalla».